Esta fotografía fue tomada en una excursión a la cual tuve la suerte de participar. Siendo Costarricense siempre quise conocer el barrio de el que Costa Rica, forma parte.
En la ciudad de Granada en Nicaragua, se encuentra su mercado, es un cascarón enorme de 4 paredes externas altas con acabados coloniales maravillosos y un color verde agua que, desentona y llama la atención poderosamente por encima de los tramos y vendedores ubicados en sus aceras. Este mercado pareciera que una vez fue un centro militar. Más que cualquier otra cosa.
Una vez que atraviesas las barreras creadas por los vendedores ambulantes y entras al mercado.
Tramos de verduras, carnes, ropas, zapatos y artículos de cuero forman un laberinto oscuro del cual podrías sentir temor o desconfianza si no fuera por la cálida mirada y trato de sus vendedores.
Una anciana vendedora de mirada amable pero poderosa a la vez conmovió mi lente.