Cómo disfrutar del verano sin sustos

El verano es un momento de diversión y relajación para la mayoría de las personas. Pero para las personas mayores, el calor y el sol pueden ser peligrosos si no se toman las precauciones adecuadas. Aquí os dejamos algunos consejos que los adultos mayores, así como sus cuidadores, pueden usar para asegurarse de que tengan un verano divertido y seguro.

Mantente hidratado

Las personas mayores son más susceptibles a la deshidratación que las personas más jóvenes porque pierden su capacidad de conservar el agua a medida que envejecen. También pueden volverse menos conscientes de su sed y tener dificultades para adaptarse a los cambios de temperatura. Recuerda beber agua con frecuencia y asegúrate de llevar algo para esos largos recorridos de verano. Es importante que los cuidadores se asegurem de que las personas mayores estén bebiendo productos de reemplazo de sudor (que contienen sal y potasio) para reemplazar el agua que pierden durante el verano.

Habla con tu médico

Consulta con tu equipo médico para asegurarte de que los medicamentos, en caso de tomarlos, no se vean afectados por las temperaturas más altas, especialmente si no tienes aire acondicionado en tu hogar. Algunos medicamentos son menos efectivos si se almacenan a temperaturas más altas que la temperatura ambiente y lo último que alguien quiere es que una condición médica prevenible se agrave debido a las altas temperaturas.

Mantén tu humor

Incluso pequeños aumentos de temperatura pueden acortar la esperanza de vida de las personas mayores que están enfrentando condiciones médicas crónicas. Los centros comerciales, cines y bibliotecas brindan espacios agradables y acogedores si la casa de una persona mayor no tiene aire acondicionado. También brindan una gran oportunidad para salir de la casa y hacer algo de ejercicio sin el agotamiento del calor. "Las personas mayores son mucho más vulnerables a los efectos dañinos del calor, ya que sus cuerpos no se ajustan tan bien a los cambios repentinos de temperatura", comentó la Dra. Lubna Javed, ex integrante de HealthCare Partners Medical Group. "Algunas afecciones médicas crónicas y medicamentos recetados pueden afectar la capacidad del cuerpo para reaccionar de manera eficiente al aumento de la temperatura".

Mantente en contacto

Las altas temperaturas pueden ser potencialmente mortales, por lo que la comunicación juega un papel importante para garantizar la seguridad de las personas mayores. Los adultos mayores deben informar a sus amigos y familiares si pasarán un período prolongado de tiempo al aire libre, incluso si solo están haciendo jardinería. Los cuidadores deben controlar la salud y el bienestar de sus seres queridos al menos dos veces al día.

Conoce a tus vecinos

Pónte en contacto con aquellos que viven en tu vecindario y aprende un poco sobre ellos y sus horarios. Si eres una persona mayor, ve si un vecino más joven, tal vez incluso uno de sus hijos, puede visitarte de vez en cuando para asegurarse de que todo esté bien. La compañía extra y la amistad que puede resultar es una ventaja.

Sabe a quién llamar

Prepara una lista de números de teléfono de emergencia y colócalos en un área de fácil acceso. De esta manera, se puede llamar a las personas adecuadas para ayudar a prevenir rápidamente cualquier problema adicional o evitar que los problemas médicos empeoren.

Usa el material correcto

Todos, incluidos los adultos mayores, deben vestirse de acorde al clima. Cuando hace calor, algunas personas encuentran que los tejidos naturales (como el algodón) son más frescos que las fibras sintéticas. Llena tu vestuario de verano con ropa holgada y de colores claros para que te sientas más fresco y cómodo.

Protege tus ojos

La pérdida de la visión puede ser común entre las personas mayores, y la exposición excesiva al sol puede irritar los ojos y causar más daños. El uso de gafas de sol puede proteger tus ojos de los dañinos rayos UV y preservar tu visión.

Conoce los riesgos de la hipertermia

Durante el verano, ten especial cuidado con las temperaturas corporales anormalmente altas, una condición conocida como hipertermia. El golpe de calor es una forma avanzada de hipertermia que puede ser mortal. Asegúrate de conocer las señales de advertencia y busca atención médica de inmediato si tu o alguien que conoces experimenta estos síntomas:

• Un cambio en el comportamiento, como actuar confundido, agitado o malhumorado
• Piel seca, enrojecida
• Náuseas y vómitos
• Dolor de cabeza
• Respiración pesada o pulso rápido
• Desmayo

Abusa del protector solar y usa sombreros

Todos, jóvenes y mayores, deben usar protector solar cuando estén al aire libre. Los adultos mayores necesitan especialmente la protección solar adicional para ayudarlos a mantenerse saludables. Los cuidadores, familiares y amigos pueden ayudar recordándoles a sus seres queridos que se apliquen el protector solar y ayuden a ponérselo cuando sea necesario. Los sombreros también son una gran idea.

Ejercicio inteligente

Si disfrutas de actividades al aire libre, como caminar o hacer jardinería, asegúrate de usar la ropa y el equipo de protección adecuados. También es importante hacer un seguimiento del tiempo. No te quedes fuera por largos períodos de tiempo y asegúrate de beber incluso más agua de lo habitual cuando hagas ejercicio. Además, practica ejercicio al aire libre temprano en la mañana o más tarde en la noche, cuando el sol no está en su punto máximo. Intenta evitarlo en períodos excesivamente calientes o en las denominadas olas de calor.