What can you find in the Alzheimers Dictionary?

The Alzheimers Dictionary is the bridge that connects all those affected and related to Alzheimers and dementias with the terms, concepts and expressions that are part of this field. To understand them is to better understand what we are dealing with. A living and constantly growing space, which will evolve with new terms and expressions with your help, responding to your needs and demands. This is a tool that is in no way intended to replace conversations with specialised doctors. For family members and informal carers, it can be a link to a world of which they are unfamiliar with the technicalities. Shedding light, accompanying them on a difficult path in which knowledge helps to make better decisions and improve the quality of life of patients and relatives.
This project has been carried out by a team of philologists and lexicographers from several universities and research centres who have previously worked on different research projects focusing on the field of specialised lexicography, particularly medical lexicography. These projects, like this one, have been directed by Professor Bertha M. Gutiérrez Rodilla, from the University of Salamanca (Spain), who has been dedicated for more than twenty years to the diachronic and synchronic study of scientific language and medical language and is renowned for her publications in this field.

desorientación

English
disorientation
Etymology

Derivado de desorientar y -ción.

Explanation

La orientación es el conocimiento que todos tenemos respecto al entorno espacial y temporal en el cual transcurre nuestra vida, absolutamente relacionado con determinadas capacidades o funciones cognitivas como la atención y vigilancia, la memoria reciente o el conocimiento autobiográfico, por ejemplo. Eso hace que cuando estas funciones cognitivas se alteran se produzca la desorientación, algo muy característico en las demencias. Esto no significa que la desorientación siempre esté ligada a una demencia, pues puede aparecer en otras circunstancias de la vida y es algo que ocurre con relativa frecuencia en los ancianos sanos. La desorientación puede afectar al espacio -desorientación espacial-, al tiempo -desorientación temporal- y también a lo concerniente a la propia persona -desorientación personal-.

 

A medida que va progresando la demencia, la desorientación del paciente va siendo mayor: lo que al principio era simplemente no recordar el día del mes o de la semana en que se encontraba, pero sí el mes y el año, después será no saber ni siquiera estos últimos. Lo mismo sucede con el espacio.

 

La llamada terapia de orientación a la realidad (TOR), muy utilizada en los programas terapéuticos de las demencias, es un conjunto de técnicas -pertenecientes al grupo de las terapias no farmacológicas- que buscan que la persona tome conciencia de su situación en el tiempo (orientación temporal), en el espacio (orientación espacial) y respecto a su propia persona (orientación personal). Se lleva a cabo en sesiones con pequeños grupos de pacientes en las que tras situarlos temporalmente (fecha), espacialmente (lugar donde se encuentran) y personalmente (nombre y edad) se realizan diversos ejercicios que buscan trabajar aspectos cognitivos relacionados con la memoria y el lenguaje y la propia orientación: deambulación guiada, actividades de la vida diaria guiadas, comentarios de actualidad, ejercicios de memoria, etc.

Examples

«Nos encontramos con trastornos de la orientación en aquellas personas que sufren pérdida de memoria o trastornos confusionales, pero, sobre todo, es especialmente frecuente en aquellas personas que padecen algún tipo de demencia. [...] Algunos aspectos de la desorientación en el tiempo y en el espacio inmediato se encuentran relacionados con la pérdida de la memoria reciente. Respecto a la persona, los aspectos que más se pierden en las fases leves son aquellos referentes a su edad, siendo el año de nacimiento, la fecha y el nombre de sus familiares más resistentes al deterioro en las primeras fases» (Martín Martos y Moreno García, 2014).

«Aparecen posteriormente otros trastornos, tales como dificultades para encontrar las palabras precisas o realizar frases bien estructuradas, o episodios de desorientación espacial en los que confunden calles o se pierden en lugares no habituales» (Slachevsky et al., 2009: 27).

Pérdida del conocimiento que la persona tiene del entorno, temporal y espacial, en que vive e, incluso, de su propia persona.