Envejecimiento de la población: Un nuevo impulso para los negocios
La población mundial de más de 60 años de edad abarcará a más de uno de cada cinco seres humanos a mediados de siglo, y pasará de 900 millones en 2015 a 2.100 millones en 2050, según la Organización Mundial de la Salud.
A medida que la demografía cambia, los crecientes costes de la salud y las preguntas sobre la idoneidad de los programas de pensiones públicos y privados y de los fondos de jubilación despiertan preocupación. Por supuesto, hay que abordar estas cuestiones, pero hay un lado positivo.
El aumento de la longevidad ha estimulado un crecimiento económico sin precedentes y nuevas oportunidades para la realización personal. Las personas mayores son generalmente más saludables que sus contrapartes de generaciones pasadas, y buscan permanecer comprometidas y relevantes el mayor tiempo posible. Los avances en biociencia ofrecen la perspectiva de una vida aún más larga, saludable y activa.
Con números crecientes, los adultos mayores representan un mercado emergente dinámico y un recurso de capital humano. A medida que los mercados evolucionan para satisfacer sus necesidades y aspiraciones, las oportunidades abundan.
Charles Darwin reconoció que la supervivencia consiste en la adaptación a entornos cambiantes, una cualidad que es tan imperativa para las empresas como para las especies. El sector privado ha estado a la vanguardia de la industrialización y la innovación científica, desarrollando nuevos mercados y abriendo vías para diversos interesados. El envejecimiento es su próxima frontera.
La economía de la longevidad está redibujando las líneas económicas, cambiando la faz de la fuerza laboral, avanzando la tecnología y las innovaciones, y rompiendo las percepciones de lo que significa envejecer. Y este mercado cruza fronteras. Existen proyecciones que el poder adquisitivo global de los mayores de 60 años alcanzará los 15 mil millones de dólares anuales en 2020.
Una corriente de nuevas ofertas en biotecnología, dispositivos, productos farmacéuticos y servicios de atención médica se dirige a los consumidores de más edad. En Japón, los cuidadores robots, o "carebots", han causado sensación. Cuando se trata de vivienda, transporte, entretenimiento, comida y viajes , las personas mayores ya tienen sus preferencias.
Se avecina una edad de oro para los servicios financieros, impulsada por un enorme aumento de los activos financieros de los hogares, controlados predominantemente por inversores de más edad. Desde hogares inteligentes hasta servicios innovadores, desde el aprendizaje permanente en el campus y en línea hasta nuevas ofertas en alimentos, transportes y viajes, nos espera un mercado vasto y lucrativo de nuevos productos, servicios e innovaciones.
Un potente banco de talentos para las empresas
Los adultos mayores no son sólo consumidores, son nuestro único recurso natural en crecimiento, una fuente de talento que puede impulsar los negocios y mejorar las comunidades del futuro. Y están listos y dispuestos.
Los adultos mayores de hoy en día buscan sentido y propósito, alterando las normas de jubilación y expresando un creciente interés en el trabajo de por vida y el voluntariado.
Este perfil desafía los estereotipos anticuados de los ciudadanos geriátricos que pesan sobre la economía. De hecho, cuando las personas mayores participan activamente, los beneficios fluyen en todas las direcciones.
Aportan experiencia y estabilidad a sus lugares de trabajo y esfuerzos cívicos, la seguridad financiera les ayuda a reforzar la economía como contribuyentes y consumidores, el compromiso mejora su propia salud y bienestar.
Los empleados mayores proporcionan estabilidad emocional, habilidades complejas de resolución de problemas, pensamiento matizado y conocimientos institucionales. Sus talentos complementan los de sus contrapartes más jóvenes.
Como demostró un experimento ampliamente reconocido de BMW, la productividad mejora cuando los equipos de trabajo son intergeneracionales. Los trabajadores mayores pueden ser mentores y servir como modelos para los compañeros más jóvenes. A los equipos de edades diversas les va mejor en la resolución de problemas y en la generación de ideas que a los grupos de la misma edad.
El azote del edadismo
Desafortunadamente, el envejecimiento continúa devaluando a los trabajadores mayores y a los adultos mayores en toda la sociedad. Con demasiada frecuencia se ven excluidos de la contratación, los ascensos e incluso de las oportunidades de voluntariado debido a los prejuicios.
De la misma manera que otros movimientos han cambiado los corazones, las mentes y la cultura misma, hay una sensación generalizada de que es hora de que la diversidad de edades ocupe su lugar en el centro del escenario. Las empresas pueden tomar la iniciativa, dando ejemplo y haciendo impactos positivos incluso cuando se centran en mejorar la productividad y el rendimiento.
Las empresas están en una posición única para promover políticas inteligentes y cambiar actitudes, para defender las necesidades y deseos, así como el potencial de los adultos mayores.
El envejecimiento de la población puede ser una bendición para los negocios. Con conciencia y un nuevo enfoque, las empresas de todo el mundo pueden disfrutar de un futuro más brillante que ofrece beneficios tanto para el resultado final como para la sociedad en general.