¿Qué puedes encontrar en el Diccionario de Alzhéimer?

El Diccionario de Alzhéimer es el puente que une a todos aquellos afectados y relacionados con el alzhéimer y las demencias con los términos, conceptos y expresiones que forman parte de este ámbito. Comprenderlos es entender mejor a qué nos enfrentamos. Un espacio vivo y en constante crecimiento, que evolucionará con nuevos términos y expresiones con vuestra ayuda, respondiendo a vuestras necesidades y demandas. Se trata de una herramienta que en ningún caso pretende sustituir las conversaciones con médicos especializados. Para familiares y cuidadores informales puede significar un nexo con un mundo del que desconocen los tecnicismos. Arrojar luz, acompañar en un camino difícil en el que el conocimiento ayuda a tomar mejores decisiones y a mejorar la calidad de vida de pacientes y familiares.
Este proyecto lo ha llevado a cabo un equipo de filólogos y lexicógrafos de varias universidades y centros de investigación que ha trabajado anteriormente en diferentes proyectos de investigación centrados en el dominio de la lexicografía especializada, particularmente la lexicografía médica. Dichos proyectos, al igual que este, han sido dirigidos por la profesora Bertha M. Gutiérrez Rodilla, de la Universidad de Salamanca (España), dedicada desde hace más de veinte años al estudio diacrónico y sincrónico del lenguaje científico y al lenguaje médico y reconocida por sus publicaciones en dicho ámbito.

apatía

Inglés
apathy
Etimología

Del latín apathia, y este del griego apátheia (ἀπάθεια) ‘falta de sentimientos’.

Explicación

La apatía es una de las manifestaciones psicológicas y conductuales más frecuentes de entre las que se asocian a la enfermedad de Alzheimer. La mayoría de los pacientes, en algún momento de la enfermedad, sufren una progresiva pérdida de interés por su cuidado personal, sus actividades y su entorno.

Ejemplos

«El enfermo apático no desarrolla ninguna actividad espontáneamente o está muy disminuida. No se ocupa de las actividades rutinarias, es incapaz de limpiar la casa, hacer la cama o la comida, o cumplir con otras obligaciones cotidianas. Se pasa el tiempo sentado en el sillón y ni siquiera enciende el televisor. No inicia una conversación de forma espontánea y tiende a no participar cuando hay varios interlocutores. Abandona los pasatiempos que siempre le distrajeron y que ahora no parecen divertirle. La vida social carece del menor interés para él. No manifiesta capacidad emocional, de forma que no reacciona ante situaciones que previamente le habrían causado satisfacción o pesar. Cuando la apatía se agrava, el enfermo abandona incluso la higiene» (Alberca, 2010: 91). 

«La paciente muere tras cuatro años y medio de enfermedad. Al final se encontraba en un estado de completa apatía, con las piernas encogidas en la cama, sufría incontinencia y, pese a todos los cuidados que recibía, desarrolló úlcera de decúbito» (A. Alzheimer, en Maurer y Maurer, 1998/2006: 195).

Pérdida o disminución de la respuesta afectiva a los estímulos emocionales.